domingo, 15 de septiembre de 2013

Chamuscados (3)


Seguimos con el culebrón del Walkie-Talkie. Soy consciente de que este tipo de entradas pueden llegar a laminar la credibilidad que nunca tuvo, pero no puedo evitarlo. Rafael Viñoly, el arquitecto del edificio (rebautizado ya como el Walkie Scorchie, algo así como el Walkie abrasador) ha salido al paso de las críticas en un artículo para The Guardian de enjundioso titular: El arquitecto del Walkie Talkie "no se dio cuenta de que iba a estar tan caliente". Fíjate el análisis tan profesional que hace el arquitecto uruguayo del problema causado por su torre de 37 plantas: "Lo llaman el rayo mortal, porque si vas ahí mueres. Es espectacular esta cosa". Reconoce que también le pasó algo parecido en un hotel que hizo en Las Vegas, en ese caso sí que se dio cuenta y avisó, pero "a quién le preocupa si fríes a alguien en Las Vegas, ¿no?" (?!?). Finalmente sentencia: "Cuando vine a Londres por primera vez hace años, no era así. Ahora tenéis muchos días soleados. Así que deberíais echar la culpa de esto al calentamiento global, ¿verdad?". Rafael, nos encanta esa actitud tan relaxed de la que haces gala. Eres una inspiración. El caso es que mientras llega el otoño han colocado una especie de pantalla protectora para evitar la radiación del fryscraper, como le llama Oliver Wainwright. Esperamos con fruición algún comentario sobre el particular del Príncipe Carlos.

2 comentarios:

  1. Desde luego que ahora tiene un problema, a ver cómo sale de ésta. Supongo que pensaría que como en Londres llueve mucho nunca saldría el sol.

    Aprovecho para felicitarte por el blog Samuel, te he enlazado como referencia desde el mío.

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    1. Gracias Pablo! Él alega que los expertos encargados de medir la radiación del edificio le dieron una cifra equivocada, muy inferior al calor que realmente provoca el reflejo. Al final, con ese espíritu comercial que tienen los ingleses, esto acaba convertido en una atracción turística más de Londres...

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