viernes, 30 de agosto de 2013

La biblioteca feroz



Hoy visitamos la Biblioteca Pública Eugenio Trías-Casa de Fieras de Madrid, inaugurada en abril. Está dedicada al filósofo barcelonés Eugenio Trías fallecido unos meses antes. Su curioso segundo nombre se debe a que sus dependencias albergaron en tiempos un pequeño zoo continuación del primero que hubo en España construido cerca del Jardín Botánico por orden de Carlos III. A finales del XVIII se trasladó al parque del Buen Retiro, cerca de la Puerta de Alcalá, para finalmente pasar, ya en 1830, a la ubicación que nos ocupa, también en el Retiro justo al lado de la Puerta de Sainz de Baranda, donde se mantuvo hasta 1972. Aún recuerdo los monos que estaban en un foso que todavía se conserva. El edificio principal ("La leonera") albergaba a los animales más feroces (leones, tigres y hasta hienas) en unas jaulas que sobresalían del edificio como puedes ver en las últimas fotos. El elefante era el rey del zoo, siendo Pizarro (una hembra, curiosamente), la que protagonizó el suceso más bizarro del parque al escapar, haciendo honor a su nombre, para descubrir Madrid. Terminó en una pastelería de la calle Velázquez donde se puso las botas (años más tarde, en 1873, precisamente otro empacho acabaría con la conquistadora). También por aquellos años se organizaban penosos "zoos humanos", en los que aborígenes traidos de lejanos confines eran presentados a los incrédulos madrileños. Los animales, cada vez más numerosos, vivían en pésimas condiciones y finalmente en 1972 fueron trasladados al actual Zoo de la Casa de Campo (había más de 500 ejemplares para entonces). La popularidad de este parque zoológico fue tal que había días en los que se congregaban hasta 200.000 personas para ver a las "fieras".

Hasta 2004 el edificio fue sede de la Junta Municipal de Retiro y tras unos años en desuso y una inversión de 9,5 millones se ha convertido en biblioteca municipal según un proyecto de los arquitectos Jaime Nadal y Sebastián Araujo, que encontraron el edificio "machacado" según sus propias palabras y debieron sanearlo y restaurarlo cuidadosamente. La intervención más curiosa son los cubos de cristal, magníficos miradores justo donde antes estaban las jaulas de los fieros animales. El proyecto incluía también la rehabilitación del antiguo foso de los monos para crear una sala de lectura de cubierta transparente pero se desestimó porque suponía una profunda dentellada al presupuesto.

En las paredes de la biblioteca podemos leer citas de Eugenio Trías, el "exorcista ilustrado" como le gustaba definirse, para el que según su hijo "escribir era inscribir en la carne, tatuar algo al que lee". Esta te va a gustar:

  

lunes, 26 de agosto de 2013

Genérico vs específico


Con el Walkie-Talkie de Viñoly y el Rallador de queso de Rogers ya casi terminados ¿Qué opinas del nuevo skyline londinense? A Rowan Moore no le gusta, ve calidad en los edificios por separado, pero opina que no pegan ni con cola juntos: "Lo que podemos acabar teniendo es un certero diagrama de la cutura de la City, de bulliciosa competencia, con edificios gritándose unos a otros como brokers en el parqué de la Bolsa, y de regulación pública que se quiebra con facilidad, todo ello sin elegancia. Es feo y mucha gente no va a tener más remedio que verlo" (artículo completo). En una reciente entrevista, Koolhaas, preguntado si veía un cambio dramático en el paisaje urbano de Londres respondía, con traviesa sonrisa (con lo que a él le va la anarquía y lo XXL) que no hay para tanto, y que, al contrario que en París, se haga lo que se haga en Londres "no se va a perjudicar su coherencia previa". Pues si su skyline lo aguanta todo, querrá decir que Londres carece precisamente de esa coherencia, vamos, que con lo perjudicado que ya está, da igual lo que le eches, algo que para el holandés no es ni mucho menos un defecto. Fíjate lo que afirma en su ensayo La ciudad genérica precisamente sobre la ciudad del Támesis: "Londres -su única identidad una falta de identidad clara- está continuamente convirtiéndose en aún menos Londres, más abierta, menos estática". Su falta de carácter ("¡abajo el carácter!") la libera de la "camisa de fuerza de la identidad". ¿La ciudad genérica, típicamente asiática, tiene en Londres su más destacado exponente en Europa? "La ciudad genérica rompe con su ciclo destructivo de dependencia: no es otra cosa que un reflejo de la necesidad presente y la capacidad presente. Es la ciudad sin historia. Es lo bastante grande para todo el mundo. Es fácil. No necesita mantenimiento. Si se queda pequeña, simplemente se expande. Si se hace vieja simplemente se autodestruye y se renueva. (...) Es "superficial", como un decorado de un estudio de Hollywood, es capaz de producir una nueva identidad cada lunes por la mañana."

 Y yo me pregunto ¿qué preferimos para vivir, ciudades genéricas o específicas? Supongo que un europeo respondería que específicas, nos van las raíces y la identidad (en algunas zonas muchísimo). A un estadounidense quizá le dé igual o incluso prefiera las ciudades genéricas, por aquello de la movilidad que tanto practican, que posiblemente conduzca a un cierto desarraigo. De todas formas lo curioso de todo esto es que creo que en el fondo, y especialmente desde el efecto Bilbao, la tendencia es a buscar la diferencia. Bilbao, ciudad genérica, dejó de serlo gracias al Guggenheim, y de hecho ese era el objetivo fundamental de los políticos que impulsaron un proyecto tan arriesgado: poner la ciudad en el mapa, venderla como destino turístico (a lo mejor eso es la clave de todo). Desde entonces muchas ciudades e incluso pueblos (dentro y fuera de España) han buscado ese efecto, con resultados rayando en lo ridículo. Viva la diferencia frente a abajo el carácter. Y es que al final nos sale la vena tribal. O comercial. Lo más paradójico es que se busca la diferencia apostando por estudios de prestigio que a menudo acaban haciendo edificios si no clonados, casi. Observa estas fotos ¿A que parecen del Guggenheim de Bilbao? Pues son del auditorio Disney en Los Ángeles, obviamente del mismo arquitecto, Frank Gehry.

En fin, volviendo a la foto de Londres decir que, hablando del rey de Roma, resulta que podemos ver el remate de la sede de la banca Rothschild del propio Koolhaas (esa especie de rectángulo grisáceo a la izquierda de la torre de Rogers), de una discreción inusual en el holandés, como él mismo menciona en la entrevista. Desde mi punto de vista aficionado, y habiendo visto solo fotos, diría que el Cheesegrater es un típico producto de Rogers, una imponente máquina sin concesiones a la galería (no es tan bello como el Shard) pero que supone un añadido interesante a la ciudad a pesar de sus desproporcionadas dimensiones y combina bien tanto con la afilada aguja de Piano como, por contraste, con las suaves redondeces del Pepinillo de Foster, que mantiene muy bien el tipo a pesar de ser bastante más bajo. El que me parece increíblemente horroroso es el Walkie-Talkie: fofo, deforme y sin el más mínimo interés, como un cabezudo bailando entre gigantes. De todas formas, sobre gustos...

jueves, 22 de agosto de 2013

Edificio Urumea



Bueno pues este es el edificio que planteábamos como acertijo hace unos días. Está en San Sebastián y es de Rafael Moneo, que trabajó junto a los arquitectos Xabier Unzurrunzaga, Javier Marquet y Luis Zulaica. Moneo tiene también en la ciudad el auditorio Kursaal, a una manzana del edificio Urumea (puedes verlo en la segunda foto) y la iglesia de Iesu. En el solar donde se encuentra ahora este bloque de viviendas se levantaba el emblemático frontón Urumea, una construcción de 1926 con una elegante fachada (Urumea es el nombre del río que corta de norte a sur la ciudad). Como curiosidad, comentar que la reina María Cristina, asidua veraneante donostiarra, llevó el deporte de la pelota vasca a Madrid, donde gozó de gran popularidad. Algunos pelotaris eran tan famosos como hoy Ronaldo y en los años 20 tanto el Real Madrid como el Atlético contaban con secciones deportivas de pelota. Hubo varios frontones en la capital, ya desaparecidos salvo el de Beti Jai, en ruinas pero recientemente declarado patrimonio histórico por la Comunidad de Madrid. La pelota vasca perdió su gancho tras la Guerra Civil por la imparable popularidad del fútbol.

El puente que dábamos como pista (que precisamente lleva el nombre de María Cristina), es del ingeniero José Eugenio Ribera, al que se considera el introductor del hormigón armado en España.

lunes, 19 de agosto de 2013

Halcones nocturnos


Al pie del edificio Flatiron en Nueva York se ha colocado una instalación a tamaño natural del famoso cuadro Nighthawks de Edward Hopper (al parecer el icónico edificio habría servido de inspiración al pintor). De paso sirve al museo Whitney para anunciar su exposición sobre Hopper abierta hasta el 6 de Octubre. Ya puestos, decir que el Whitney será ampliado con un nuevo edificio junto al High Line diseñado por Renzo Piano bastante más atractivo que la sede original de Marcel Breuer (el creador de la silla Wassily). Por cierto que el High Line, una antigua via ferroviaria elevada reconvertida en paseo urbano por Diller Scofidio + Renfro, está resultando todo un potente imán para la arquitectura más espectacular, la última en unirse al club es Zaha Hadid con un lujoso bloque de viviendas.

viernes, 16 de agosto de 2013

Casa pop-up


Esta casa se construye en un día. Con un principio muy similar al de Ikea, el estudio de Richard Rogers ha diseñado este bloque de tres pisos y ha hecho una demostración de su montaje en la exposición Inside Out que sobre el arquitecto se celebra en estos momentos en la Royal Academy londinense (video time-lapse aquí).   

martes, 13 de agosto de 2013

Esta casa es una ruina


Esta ha sido una de mis lecturas (más bien visonados) del verano: el libro con video sobre la casa en Burdeos de Rem Koolhaas realizado por Ila Bêka y Louise Lemoine dentro de la serie Living Architectures que según los autores pretende una visión distinta (mordaz e iconoclasta) de la arquitectura. Genial, oye, caña al mono que es de goma: hemos puesto en un sinfín de altares a los starchitects y así nos ha ido. Toca (tocaba, la labor ya está hecha) desacralizarlos y hacerles pisar tierra firme. Fango incluso. A tal fin se dedican con ahínco los autores que, lejos de hacer el típico video o reportaje fotográfico en el que los edificios aparecen impolutos y artificiales, apenas sin personas (y si aparecen parecen maniquíes de escaparate), han tomado como cicerone a Guadalupe Acedo, limpiadora de la casa de Burdeos, y han dejado que un día de su habitual jornada sea hilo conductor que vertebre el video. El resultado: un original trabajo que nos muestra los entresijos de una casa venerada por entendidos y fans de la arquitectura diseñada específicamente para un hombre inválido (una enorme habitación-plataforma elevadora que comunica todos los niveles de la casa es su tecnológico corazón), que a los cuatro años de su construcción (1998) fue incluida en el listado del Patrimonio francés. Pero ¿cómo es en la intimidad esta casa-monumento (housument o monuhouse lo llaman los autores) con su extraña estructura de vigas al aire que recuerda a las casas de Neutra? Pues está llena de insospechados y terribles secretos que la señora Acedo nos irá desentrañando...

Ya hemos hablado de los pros de tal planteamiento. ¿Hay contras?  Pues sí. Es un libro y video para entendidos en la materia (prácticamente no se explica qué pinta semejante montacargas en el medio de la casa, Guadalupe hace una brevísima referencia al dueño; no hay tampoco en el libro explicación sobre su razón de ser o una reseña sobre las características de la casa), y es tal el afán de cinéma vérité que vemos con más claridad las espaldas de Guadalupe (la cámara le sigue fatigosamente a todas partes) que la casa en sí. El video está muy sesgado, se centra en exclusiva en los penosos achaques de la casa, que realmente claman al cielo (cuando llueve surgen innumerables goteras, el mecanismo de la plataforma da problemas, los enormes cristales que cubren las fachadas se agrietan...), con momentos realmente cómicos (como Guadalupe subiendo con todo su instrumental por una estrecha escalera de caracol que parece diseñada para que sus usuarios se rompan la crisma varias veces al año o los esfuerzos de los encargados de limpiar los cristales para hacer su difícil labor): es obvio que para la heroica limpiadora (que no obstante siempre mantiene una diplomática distancia) la casa es una merde. La opinión de Koolhaas está presente (el video incluye un extra en el que el arquitecto se explica, bueno, es un decir, con esa capacidad que Dios le ha dado para la abstracción teórica se escapa como era previsible por la tangente), pero me hubiera gustado conocer también el punto de vista de la esposa, viuda ya, (el dueño falleció) que sigue viviendo allí. Sólo aparece en el epílogo del video, corriendo las interminables cortinas y apagando paulatinamente las luces de la casa cual espectro en la noche. Máquina disfuncional y sin sentido una vez que la persona para la que fue diseñada no la ocupa ¿Por qué no la vende? ¿Qué le hace continuar allí? ¿Se ha convertido en una suerte de mausoleo que guarda la memoria de su compañero? ¿Cómo se diseñó? ¿Cómo querían que fuera la casa? ¿Qué aportó o cambió Koolhaas con respecto a la idea original de la pareja? etc etc etc. Toda arquitectura enmarca una historia humana, y aquí nos la hemos perdido. En su lugar, el libro se extiende nada menos que 21 páginas en una entrevista a Bêka y Lemoine donde explican, casi a nivel metafísico, las razones de su proyecto (por cierto, en su web tienes un tráiler del video).

Encuentro en Del tirador a la ciudad una cita de un pequeño ensayo de Siza (Vivir una casa) que nos viene al pelo: “La idea que tengo de una casa es la de una máquina complicada en la que cada día se avería algo: bombilla, grifo, desagüe, cerradura, enchufe (…) Los cajones se atascan, se rompen las alfombras (…) Todas las camisas, calcetines, pañuelos… yacen rotos junto a la tabla de planchar cuya tela de protección presenta un aspecto lamentable. Vivir en una casa es un trabajo a jornada completa. Su dueño es al mismo tiempo bombero de guardia, enfermero y socorrista: domina todas las artes”. Al final la casa se convierte en otro miembro de la familia al que queremos a pesar de sus defectos y manías y al que cuidamos cuando enferma.

Y acabo con otra cita del último Delirio bajo control de Carlos Marzal para la revista Descubrir el Arte. El poeta, al hilo de la silla Zigzag de Rietveld, que presume, con razón, incomodísima, elabora un irónico texto en el que critica esos muebles diseñados para todo menos para ser cómodos. Sin embargo deja escapar una idea que quizá justifique algunas de las extravagancias con las que arquitectos y diseñadores nos castigan: "La humanidad ha progresado por su empeño en no rendirse a lo evidente, por su apetito de aventura, por su desprecio al sentido común".





sábado, 10 de agosto de 2013

Atención pregunta (2)

A ver, una ayudita para adivinar cuál es el edificio misterioso del otro día. Más fotos:


El edificio de viviendas, que acaba de cumplir cuarenta años, está en plena restauración  (lo están dejando como nuevo). Sus formas curvas sorprenden en un arquitecto que suele preferir la línea recta, aunque en tiempos ayudara en el diseño de las curvas quizá más famosas de la arquitectura moderna mundial. Tiene en la misma ciudad otros dos edificios. ¿¿Ya??

jueves, 8 de agosto de 2013

Naturaleza muda




“Dejemos a los necios afirmar que un hermoso árbol, un bello río, una sublime montaña, un bonito caballo o una estupenda figura humana son superiores al golpe de buril de Miguel Ángel o al verso de Dante; nosotros decimos, con mayor propiedad, que la “Naturaleza” es estúpida frente al arte y que es “muda” si el hombre no la hace hablar”. (Benedetto Croce, citado en Arquitecturas singulares de Antonio Bonet Correa)

lunes, 5 de agosto de 2013

Atención pregunta



Bueno pues, llegó agosto y con él una merecida y mirífica molicie que no obstante no debería llevarte a caer en un estado vegetativo completo. Para ayudarte a mantener un cierto tono neuronal estamos nosotros. Hoy vuelvo a traerte uno de esos ejercicios/acertijos sobre arquitectura para que adivines autor, ubicación y nombre del edificio de la foto.


Para que te centres, te diré que este edificio está en una ciudad española con un río que cruzan varios puentes. Debería bastarte. ¿Que necesitas más datos? Bueno, pero que conste que sólo porque es verano y andamos bajo mínimos. Uno de esos puentes fue construido en 1904 en hormigón armado, siendo una de las primeras construcciones en nuestro país que utilizaba dicho material. El mismo ingeniero que lo diseñó empezó al año siguiente la construcción también en hormigón de un depósito para el canal de Isabel II en Madrid, en concreto el que se encuentra  entre las avenidas de Islas Filipinas y San Francisco de Sales. La obra estaba muy avanzada cuando sin previo aviso y en plena jornada laboral se derrumbó parte de la cubierta pereciendo 24 obreros. La catástrofe produjo gran conmoción dentro y fuera de nuestro país. Bueno pues, de paso, me dices también el nombre del ingeniero en cuestión. Suerte.

viernes, 2 de agosto de 2013

Al fin algo último



Pues mira por dónde también hay algo último en Albi. Se trata del auditorio Les Cordeliers de Dominique Perrault, autor de la Caja Mágica y la pasarela en forma de doble cucurucho metálico sobre el Manzanares en Madrid o del hotel ME en Barcelona.  El edificio, como ves muy avanzado, quiere, según su autor, crear "un lazo entre historia y modernidad" al dialogar con la catedral mediante el color rojizo de los paneles exteriores y el uso de ladrillo en su interior. Incorporará una malla metálica (marca de la casa) que envolverá la caja y que como puedes observar en las últimas fotos ya ha empezado a instalarse. Practica tu francés escuchando a Perrault hablando sobre el proyecto aquí.

Ya puestos, decir también que cerca de aquí, en Rodez, el estudio catalán RCR ultima el museo Soulages dedicado al artista local Pierre Soulages, "el pintor del color negro" por su interés en representar dicho color. El museo, visitado hace unos meses por François Hollande, ha costado 25 millones de euros. RCR tuvieron que competir con más de 100 propuestas entre las que se encontraban las de Paul Andreu y Jean Nouvel (vaya, con lo que le gusta el negro).